Residentes y comerciantes del barrio Jardín 103 en Chuy expresan inquietud por la escasa presencia policial. Esta situación afecta la tranquilidad, atribuyéndola a la actividad de dependientes químicos en la zona y alrededores.
Los hechos se registraron entre el viernes y el sábado pasado, según datos recabados por nuestro medio, este intento de hurto tuvo lugar en un comercio situado en la intersección de calle Río Olimar y esquina Ipiranga, los delincuentes habrían intentado acceder al local por el techo, sin embargo sus esfuerzos por concretar el ilícito resultaron infructuosos, no logrando sustraer bienes ni ingresar al interior del establecimiento.
El segundo incidente se produjo en otro negocio, ubicado en la esquina de calle Samuel Priliac y Río Olimar. En este caso, los perpetradores lograron acceder a través de una puerta del local durante la madrugada del viernes. No obstante, su intento de robo fue frustrado por la rápida acción de los propietarios.
Al otro día en horas de la madrugada del sábado, este mismo comercio fue víctima de un intento de robo, se desconoce si se llevaron algo o solo provocaron daños al establecimiento comercial, días antes también quisieron ingresar al mismo comercio pero las tres veces no lograron obtener nada.
Los vecinos de la zona han manifestado su inquietud ante la reiteración de este tipo de sucesos. Según sus declaraciones, estos intentos de robo estarían vinculados a individuos identificados popularmente como "Pastosos", un término utilizado para referirse a consumidores de sustancias químicas.
Los residentes señalan que estos individuos llevan varios meses merodeando por el área, generando un clima de inseguridad que afecta la cotidianidad de la comunidad local.
Comerciantes y residentes piden una mayor presencia policial en la zona debido a estos incidentes de inseguridad.
Rocha Portal
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