Más de 120 muertos dejó el operativo contra el Comando Vermelho en Río de Janeiro, y el Ministerio del Interior uruguayo analiza la situación y actuará en consecuencia.
El Ministerio del Interior de Uruguay mantiene activa la vigilancia en la frontera con Brasil tras el operativo policial más grande y letal registrado en Río de Janeiro.
La intervención, que movilizó a 2.500 agentes el martes, tuvo como blanco al Comando Vermelho y dejó un saldo de más de 120 muertos.
Las autoridades uruguayas informaron que las medidas adoptadas son “reservadas” por motivos de seguridad, aunque confirmaron que “se analiza la situación” y que “se actuará en consecuencia”.
La operación fue calificada como “un éxito” por el gobernador de Río, Cláudio Castro, quien aseguró que “las únicas víctimas fueron policías”.La declaración se dio tras una reunión con autoridades de seguridad y gobernadores aliados, en la que también respondió a las críticas del gobierno federal: “Quien desee contribuir, es bienvenido, a los demás, nuestro único mensaje es lárguense”.
Mientras tanto, la cifra de muertos sigue generando controversia. El gobierno estatal reconoció 119 fallecidos, pero la Defensoría Pública contabilizó 132.
En la mañana del miércoles, vecinos de una favela alinearon en una plaza más de 60 cuerpos que no habían sido registrados oficialmente, fue una acción legítima del estado para cumplir órdenes de prisión”, afirmó.
El secretario de la Policía Civil, Felipe Curi, defendió la actuación de los agentes, señalando que los fallecidos “optaron por el enfrentamiento” y que quienes se entregaron fueron trasladados a la comisaría.
Rocha Portal

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