Las autoridades reconocen que la respuesta gubernamental a la plaga del picudo rojo, un insecto que causa estragos en las palmeras, llegó con cierto retraso.
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No obstante, se resalta el firme compromiso actual para abordar la problemática de manera coordinada y efectiva, priorizando la acción interinstitucional.
En este contexto, el Ministerio de Ambiente ha constituido una comisión de trabajo dedicada específicamente a enfrentar el picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus), considerado una plaga que afecta severamente el interior del tronco de las palmeras.
El reciente 27 de mayo marcó la primera reunión del Comité de Especies Exóticas Invasoras (CEEI). Según un comunicado de la cartera ministerial, el propósito fundamental de este encuentro fue “encarar la estrategia coordinada y las acciones para hacer frente” a la infestación. Este comité congrega a representantes de diversos organismos estatales, la academia y la sociedad civil, buscando una visión integral del desafío.
La coordinadora del CEEI, Estela Delgado, se mostró franca al admitir que la administración gubernamental “llegó tarde en atender esta coordinación” interinstitucional. Sin embargo, enfatizó: “Pero lo estamos haciendo con mucho compromiso y seriedad”, en declaraciones ofrecidas durante una rueda de prensa.
La Directora Nacional de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos del Ministerio de Ambiente detalló las medidas que el Poder Ejecutivo proyecta implementar para contener la diseminación y el impacto del insecto.
Entre las acciones prioritarias, se propone la aplicación del Protocolo de Respuesta ante Especies Exóticas Invasoras como marco para abordar esta problemática específica.
Asimismo, Delgado mencionó que se recibió asesoramiento técnico de un especialista de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Esta consultoría fue crucial para la elaboración de un informe considerado “muy importante” por el CEEI.
Un punto clave identificado en el informe de necesidades es “el registro de los datos a nivel interinstitucional de forma que pueda registrarse en todo el país las palmeras afectadas. Se puedan generar modelos de predicción que nos permitan predecir justamente cómo va a evolucionar la plaga en todo el territorio nacional”, explicó Delgado.
Paralelamente, se informó que el Ministerio de Ganadería “ya determinó muchas acciones” relativas a este asunto, y se mantiene una “articulación” activa con intendencias, municipios, organizaciones sociales y empresas privadas en el esfuerzo por mitigar el problema.
Desde su detección en 2022, el picudo rojo ha extendido su presencia, afectando ya a los departamentos de Durazno, Florida, Lavalleja, Maldonado, Colonia, San José, Canelones y Montevideo.
La coordinadora del CEEI precisó que las medidas contempladas incluyen acciones tanto de “control” como de “vigilancia”. Subrayó que “muchas de las medidas tienen que ver con cómo destruimos las palmeras ya afectadas y que no tienen salvación y cómo evitamos la dispersión de las larvas en las distintas estadías que tiene este insecto”, delineando así la dualidad de la estrategia.
Cada institución implicada asumirá las responsabilidades y acciones que les corresponden. Se ha calendarizado una nueva reunión del comité para fines de junio, con el objetivo de presentar “avances concretos” y “poner en común y redondear ese protocolo interinstitucional”, concluyó Delgado.
Rocha Portal
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