La historia de Andrés Morosini y su expareja Micaela Ramos revela una serie de "banderas rojas" y señales de alerta que no fueron suficientes para evitar la tragedia que se avecinaba.
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El informe elevado por el juzgado de Mercedes a la Suprema Corte de Justicia arroja luz sobre los días previos al caso que conmocionó al país: el fallecimiento de Andrés Morosini y sus dos hijos, Francisco y Alfonsina, tras precipitarse al arroyo Don Esteban en Río Negro.
Morosini, de 28 años y oriundo de Mercedes, secuestró a los niños de la casa de su expareja, Micaela Ramos, y condujo a alta velocidad hasta el puente que él mismo había ayudado a construir como obrero, con pleno conocimiento de la profundidad y la corriente del arroyo, se arrojó al agua con los menores, provocando la muerte de los tres.
El documento judicial, reconstruye una secuencia de hechos que evidencian señales de alarma, la pareja había convivido durante trece años, pero la relación se había deteriorado en el último tiempo.
Ramos denunció violencia psicológica y mencionó un intento de suicidio por parte de Morosini en febrero. El 1º de setiembre intervino la Comisaría Especializada en Violencia Doméstica y Género.
Tras ese episodio, Morosini prometió iniciar terapia, aunque su conducta no cambió. Poco después, envió a Ramos un video inquietante por WhatsApp se lo veía en el auto con los niños, pidiéndoles que se despidieran de su madre Ramos alarmada acudió a la comisaría y formalizó la denuncia.
En sede policial, expresó que no soportaba más la situación ni las discusiones frente a los hijos. Solicitó que Morosini fuera retirado del hogar, aunque rechazó la custodia policial y pidió que la medida no afectara el vínculo entre padre e hijos.
La Justicia dispuso entonces que Morosini se alejara del domicilio y no se aproximara a Ramos por 180 días. Sin recursos para alquilar, se mudó a la casa de sus padres, a 80 metros del hogar conyugal, cumpliendo con el radio de restricción de 50 metros.
Ese mismo día, Ramos le comunicó que la relación había terminado. Morosini, en su declaración, negó haber ejercido violencia y minimizó los hechos, calificándolos como discusiones comunes de pareja. Admitió que en una de ellas los niños estaban presentes.
Menos de 48 horas después de las medidas cautelares, el 3 de setiembre por la mañana, Morosini irrumpió en la casa de Ramos, la amenazó y se llevó a los niños. “No los vas a ver nunca más”, le dijo. La tragedia se consumó poco después.
No obstante un audio con su ex-cuñada que circula por redes sociales donde Andrés Morosini, relata una situación complicada en su relacionamientos desde engaños hasta cuatro intento de suicidios por parte de Morosini, días antes de la tragedia donde el y sus hijos de 2 y 6 años fue encontrado el vehículo en el arroyo Don Esteban, con ambos cuerpos en el interior del automóvil sumergido.
Rocha Portal
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